jueves, 17 de mayo de 2012

La carta que nunca envié.

Transitorios como el cambio de estación, las flores se dispersan. Mis recuerdos por la lluvia tibia fueron tocados.

Si cierro los ojos estas tú riendo, mi corazón esta tan lleno que mis sentimientos se han desbordado.

Adiós... los días de lluvia me derrotan hasta que me borran. Trajiste paz a mi eterno dolor.

Me estoy ahogando en esta melancolía que no puede ser ocultada. Suspiro profundamente.

Fui empujado hacia abajo, hacia la oscuridad. Lluvia incesante, es inútil.

Solo pase sucesivamente agarrado de la mano con fuerza, con mucho dolor, mis pensamientos temblorosos te descubren, no olvidare una segunda vez una voz amable.

Mezclados con la lluvia mi sentimientos se disuelven, hasta que ellos también fluyen.

Adiós a los planes del futuro, tu ya no estas. Pero yo sigo y no olvido el milagro de encontrarme contigo.

El cielo lloró, reflejando mis sentimientos.

Separados.

Renuncio.

Quise estar junto a ti para siempre.


 

No hay comentarios:

Publicar un comentario